Pato que vuela ... también piensa


En vida, este pato quiso donar su cuerpo a la ciencia de Ose, fue un acto formalizado sin contrato, tan solo bastó un choque mano-ala. Quiero advertir a sus familiares y defensores, que nunca forcé ni conspiré su muerte, pero los contratos están para cumplirlos. Eso si, el próximo contrato de este tipo que realice, a de quedar constancia que el pato antes de morir, que haga el favor de desplumarse el solito, que en casa ya tenemos suficientes plumas en el edredón. Por ello, y tras llevar mas de medio pato desplumado, pero con nariz y garganta taponada de plumón y viendo una luz blanca al final del túnel, decidí despellejarlo y punto. Después trocearía sus rojas carnes en trozos pequeños, pues no conocía aún su fin, si en salsa, si para arroz, …
Aunque él mismo quiso que experimentara con sus carnes, y tras ver que Google no sabe de recetas de pato salvaje, resolví mi incertidumbre con una receta sencilla con un ligero toque de modernidad, para así quedarme elegante a la par que sencilla. Como el hubiera deseado, vamos.
- Primero hice un caramelo de vinagre de P.X. con miel, al que le añadí media botella de vino tinto y reduje a la mitad.
- Pasé por aceite una rebanada de pan y tres ajitos y reservé.
- Freí dos cebollas muy suavemente junto con el hígado y reservé.
- En el aceite que quedó y junto a dos hojas de laurel, sofreí el entregado cuerpo del pato, al que una vez tostado añadí el hígado y la cebolla frita machada en el mortero.
- Añadí la reducción de vino y caldo de pollo y deje cocer una hora.
- Por último, machaqué en el mortero al pan y el ajo frito y se lo incorporé al guiso, que coció unos 15 minutos mas.

He de decir a sus familiares, amigos y defensores, que tienen que estar muy orgullosos de este pato que me eligió a mi para que le guisara, pues a quedado un gratísimo recuerdo en nuestros paladares sus prietas carnes y la salsita tan exquisita que produjo, que estuvo a punto de hacernos casi miccionar del gustillo nuestras prendas interiores.
Id, levantad la cabeza y difundid la palabra.
Amén.

4 comentarios:

Paco Becerro dijo...

Difundiré, difundiré.... y lo llevaré a la práctica.

Qué apetecible, tan sencillo y con ese aroma... (creeme, que lo huelo desde aquí...)

Un abrazo

Arantxa dijo...

Muy bueno el post. Bueno todos tus posts son muy buenos...y el pato también ;-)

Anónimo dijo...

el pato muy rico pero no lo he probao ni de coña.besos castos

Oseypunto dijo...

Anónimo, ni lo has de probar, ya que por el water ha querido volar.