Solo-lomo, el travestido cárnico

Uno de los grandes problemas de los padres es cuando los hijos pasan del "gu-gu-ta-ta" a pronunciar sus primeras palabras, y es que una de sus preferidas es NO. Y del "no" al "no me gusta" hay una delgada línea que puede desaparecer de la noche a la mañana y hacer desfallecer al mas pintao. Entonces tienes dos opciones, encabronarte al máximo y cogerte tal berrinche como el niño o hacerte un padre consentidor y cuando sea mayor que vaya al psicólogo, que todo el mundo tiene que vivir. Yo doy una de cal y otra de arena.
Y esta semana me tocó la de consentidor. Llegué a casa con una ilusión tremenda con unas entrañas de ternera de p.m. y me puse a limpiarlas. En ello entró mi hija en la cocina, las vio y después del alarido inicial exclamó la famosa frase: NO, eso NO me lo como yo. La verdad es que son feas con avaricia. Notaba como me subía la sangre a las sienes, pero decidí ahorrarme un disgusto y perder dinero en psicólogos.
Me acordé de las malas artes de algunos maestros que ha tenido uno en esta vida y decidí engañarla vilmente, y le ofrecí solomillo de ternera que por supuesto no tenía en casa. Un amigo me había regalado un trozo de lomo alto de vaca sin hueso para probarlo y me dispuse a preparar solomillo.
Me armé de cuchillo y cual trabajos manuales empecé a cortar el lomo por la línea de estrellas que os tengo señaladas.

En minuto y medio, ya tenía una pieza casi igual que un solomillo.

Después un trabajito de chapa, recorte aquí, achuchón allí y vualá!

Tooooooma medallón de solomillo guapo. Y sin remordimiento alguno, lo acompañé de unas patatas fritas y se lo serví a mi hija del que dio buena fe, de ese pedazo de "solomillo", ya que sin duda y sin ella saberlo, salió ganando.
Quizá esto tiene poco mérito pues he engañado a una niña de once años, pero este corte lo he visto hacer bastantes veces en cocinas de restaurantes y el comensal no se ha dado cuenta. Y tú, crees que te enterarías.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Buenos días OSÉ!

Me sigue encantando tu estilo literario espontáneo, irónico, gracioso, y del cual aprendo mucho entre risa y risa (Así es como yo lo entiendo, que de nada sé).

Hoy solo te felicito y te animo a seguir escribiendo. Blogs hay muchos, cada uno escoge los que quiere visitar, pero tan campechanos, y amables de leer como el tuyo pocos.

En cuanto a dar "gato por liebre" que quieres que te diga, que a mi me la meten "doblaaa" cuando quieren, sobre todo en pescados.... si hasta cuando leo catas con gastrónomos se las meten, con nosotros que harán..

Un saludo.

Oseypunto dijo...

Gracias Guaje, uno de los motivos principales por lo que hago esto es para cuando pasáis por aquí que al menos disfrutéis y os llevéis una sonrisa.
Lo de "meterla doblá", solo te puedo decir que valgo mas por lo que callo que por lo que cuento. ;)

Pd. Uno de los blogs que elegí para visitar fue el de Ligasalsas, algo que por obligación tendré que dejar de hacer, ya que D. Liga ha decidido darse un respiro. Espero que sea breve.

eu93 dijo...

Pues la verdad, no se si me daría cuenta, creo que si, pero nunca se sabe

Vins i més dijo...

No se nota en cuanto a la textura, pues hay lomo alto que es tierno como el que más, pero en sabor hay seños si que se nota y es que es mucho más sabroso ese entrecot que ese solomillo soso...

Yo lo prefiero 100 veces... y con la grasita un poco hechita......

Oseypunto dijo...

Bienvenido Vins y més, me gusta mucho tu blog.
Ahí le has dado, en el sabor es donde realmente se puede diferenciar, aunque también en la textura, por supuesto. Pero tienes que admitir conmigo que el solomillo no es un corte habitual y por tanto puede haber paladares poco entrenados que tengan dificultades para reconocerlo.
Eu, me curré tu rissoto de calabaza con algún cambio (sin termomí, por supuesto) y es un plato espectacular, me encantó.

Anónimo dijo...

Mira a ver qué te parece esto, por si fuera de interés para tí: http://www.donaldrussell.com/
Saludos,
Enric

Oseypunto dijo...

Gracias Enric, está bien guapa la página, eso si, meten unas ostias en los precios acojonantes, al menos para mi.
Este tipo de páginas me encaaaaaantan, paso horas devorándolas, tengo un montón de ellas en los accesos directos, sobre todo de Estados Unidos. Y es que los americanos es pura pasión por la carne, en ocasiones con mejor o peor acierto, pero pasión. Además de tener un marketing bestial, las web están llenas de contenidos para informar y educar en materia cárnica, algo que lógicamente redundará en su beneficio.
En ocasiones me odio por sentir envidia de estas empresas y otras veces me avergüenzo de no tener algo así. Y es que en España, en este respecto, estamos a años luz de los americanos. Le pese a quien le pese.

Anónimo dijo...

Me alegro enormemente de que te haya gustado esta página. No hace falta decir que está radicada en Escocia donde vivo. Soy cliente habitual aunque no muy frecuente porque estoy de acuerdo contigo en que los precios son exigentes, incluso para los estándares británicos. A mi me gustaría que en España alguien se atreviera a algo así. Tu tiene pasión por la carne como profesional, así que quién sabe. Quiero añadir que nunca he comprado solomillo porque prefiero otras piezas como lengua, hígado, rabo de vaca, carrilleras y estas cosas que no son de vuelta y vuelta sino de slow cooking como dicen por aqui.
Un saludo con toda admiración.
Enric Murio